Investigadores desbaratan y confirman algunas creencias. Las frases populares en ocasiones resultan certeras y en otras, solo mentiras.
Algunas creencias sobre el amor son escogidas para inspirar canciones. Otras para dar vida a una carta rebosante de cursilería. La ciencia, sin embargo, ha confirmado y desbaratado parte de estos mitos. A continuación, algunas verdades y mentiras del amor.
A PRIMERA VISTA. Este subestimado flechazo resulta certero para la ciencia. Según el investigador chileno Agustín Ibáñez, los neurotransmisores que activan el placer se aceleran ante una persona atractiva, produciendo una sensación de apego. El físico y la fijación de la mirada son los principales estímulos de esta experiencia a primera vista.
EL AMOR NO ES CIEGO. ¿El poder del amor es tan fuerte como para bloquear nuestros gustos? Investigadores ingleses revelaron que ese sentimiento activa dos procesos cerebrales que favorecen la ‘ceguera’. Ante la presencia del ser amado, las áreas que se asocian a las emociones negativas se reducen, ayudando a producir una empatía casi mística.
LA PASIÓN ES AMOR. No tanto. El psicoanalista Pedro Horvat diferencia la pasión erótica del amor pasional. La primera se refiere al intenso erotismo sexual. Mientras que el amor pasional incluye la idealización y dependencia con el vínculo de pareja. Esto explica la desesperación del enamorado ante la amenaza del abandono.
SIN NADA A CAMBIO. Más de 40 estudios demuestran que el solo dar es una forma de amor. El estadounidense Stephen Post, profesor de Medicina Preventiva, lo confirma: “Es el amor libre del apetito, que considera que la alegría y la seguridad del amado son tan significativas como las propias”, explica.
ES INFIEL PORQUE NO ESTÁ ENAMORADO. Una investigación del Instituto de Karolinska de Suecia concluyó que la variante de un gen provoca una mayor o menor aptitud hacia la vida en pareja. Los portadores de este gen serían más infieles.
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